Seguramente, como buen amante del mundo del motor que eres, estarás cansado de leer por todas partes que la nueva generación del mítico Ford Mustang se puede comprar directamente en Europa sin intermediación de importadores. Vamos, que si quieres tener en tu garaje la última versión de este mito del automovilismo solo tendrás que acercarte a tu concesionario Ford más próximo y preguntar. Y es que el Mustang es una maravilla de coche lo mires por donde lo mires, tanto, que es muy extraño encontrarte con uno por la calle y no girar la cabeza para contemplarlo mejor mientras la baba comienza a gotear por la comisura de tus labios. Sin embargo, hubo un tiempo en el que Ford vendía en nuestro país un coche que también provocaba algún que otro esguince cervical y que también fue poco convencional verlo rodar por nuestras carreteras: hablo del Ford Probe.