Hoy toca repasar otro de esos raros vehículos que nos ha dejado la historia del automóvil, y para ello viajamos hasta tierras argentinas para conocer al Aerocar. Y no, al contrario de lo que su nombre pueda parecer, no se trataba de un automóvil que pudiese volar, aunque como podrás conocer a continuación, su peculiaridad máxima es que contaba con una hélice . Pero vamos por partes. A principios de los años 50, los técnicos Eugenio Grosovich y Gianfranco Bricci diseñaron y construyeron un prototipo de vehículo bastante innovador. Estaba equipado con una carrocería de metal, dos puertas, capacidad para seis ocupantes y un aspecto aerodinámico con cierto toque deportivo para la época. Tenía una longitud de 4,30 metros y una distancia entre ejes de 2,46 metros, construido sobre un chasis con largueros laterales y unidos por travesaños soldados. Sus creadores habían diseñado también un sistema de suspensión independiente que carecía de amortiguadores: un cilindro constitu...