En una época en la que la marca británica Rover se iba tambaleando de mano en mano, y en la que su modelo de acceso a la gama, el Rover 25, agonizaba en muchos mercados de Europa, se trató de dar un impulso a este compacto ofreciendo una nueva versión con una estética más campera. Y la verdad es que no era mala idea, porque si bien esto es algo bastante habitual actualmente, podría decirse que el Streetwise era prácticamente único en su especie. DISEÑO EXTERIOR. Si bien he mencionado que la estética de nuestro protagonista era de tipo offroad, lo cierto es que Rover no trató de venderlo como tal. Y su propio nombre lo indica, ya que podríamos traducir el término “Streetwise” como “animal de ciudad”. Disponible con carrocerías de 3 y 5 puertas, trataba de llamar la atención de jóvenes compradores que se movían con asiduidad por la jungla urbana, por lo que su estética estaba más destinada a servir como protección contra roces y pequeños golpes gracias a los paragolpes d