La carrocería de nuestro coche está en constante contacto con múltiples factores externos que pueden afectar a su estado de conservación y acelerar su envejecimiento. Para protegerlo de tales inclemencias las fundas para el coche son una buena herramienta que nos ayudará a prolongar su longevidad
De todos los órganos del cuerpo humano, la piel, junto con el pelo y las uñas, es el que está más expuesto a los agentes externos que nos rodean al estar constantemente en contacto con el exterior. Calor, frío, viento, bacterias... Muchos son las causas que pueden afectar a nuestra piel provocando quemaduras, granos, o manchas, entre otros; de ahí que muchos dermatólogos nos aconsejen proteger nuestra piel durante todos los días del año.
Pues lo mismo podría aplicarse a la carrocería de nuestro coche. Si bien desde que un vehículo sale de fábrica su carrocería y pintura están creadas para soportar las inclemencias externas, no son inmunes a ellas, y con el paso del tiempo pueden sufrir daños bastante visibles que afectarán a su aspecto y estado de conservación.
Una buena herramienta que podemos usar para tener nuestro coche a salvo de estas inclemencias son las fundas para el coche. ¿Pero cuáles son sus ventajas? ¿Qué tipo de fundas puedo encontrar y cuál es la más recomendable? ¿Qué tamaños existen? Vamos a tratar de resolver todas estas dudas.
VENTAJAS DE USAR UNA FUNDA
Según el portal https://decoche.top/fundas-para-coche/ la principal ventaja que nos aporta el usar una funda para nuestro coche es que
se evita el deterioro y desgaste exterior del vehículo, lo que cobra especial importancia cuando más alta es la gama del coche o el valor que pueda tener como antigüedad.
El clima afecta mucho a la vida del vehículo. La prolongada exposición a temperaturas muy gélidas, muy cálidas o a ambientes de humedad en zonas costeras, o el polvo que se genera en los garajes, deterioran más rápidamente las diversas piezas y componentes del vehículo. Por ello las fundas protectoras son un remedio ideal para frenar esa acción de la naturaleza.
Por contra de lo que se puede llegar a pensar, no existe un único tipo de funda con la que podemos proteger nuestro vehículo. A grandes rasgos, podemos distinguir dos tipos de fundas en función del material empleado para su fabricación:
- Fundas de materiales plásticos: son las mas económicas de todas, pero nada recomendables si vamos a tener nuestro coche cubierto durante bastante periodo, o en zonas cálidas, ya que condensan el calor que reciben y pueden formar humedades interiores.
- Por otro lado tenemos las fundas que podemos catalogar como "básicas": suelen estar hechas de poliéster con revestimiento de poliamida, lo que les da una buena resistencia al agua aunque sin ser totalmente impermeables. Lo bueno es que permiten transpirar el aire para no formar atmósferas húmedas debajo de ella.
- Y por último tenemos las fundas que podemos catalogar como "premium": como es fácil de imaginar, son más caras que las anteriores, pero ofrecen mejores propiedades. Cuentan con una doble capa de polietileno y polipropileno que te dará una protección máxima. Además, disponen de orificios de ventilación para evitar la humedad, por lo que son la solución ideal a largo plazo si vas a dejar tu coche en exterior durante mucho tiempo.
¿Por cuál decantarse entonces? En general, si el coche va estar expuesto a la intemperie lo recomendable es utilizar una funda específica compuesta mayormente de poliéster, con doble costura con interior acolchado e impermeable. Además este tipo de tela protege de las radiaciones ultravioleta y previene de los deterioros que pueden producirse en piezas y chapa cuando el coche está expuesto a altas o muy bajas temperaturas.
Sin embargo, si el coche descansa bajo techo, en lugar cerrado, requerirá una funda especial 100 % poliéster, transpirable, deslizante, con interior sedoso y especialmente creado para repeler polvo, suciedad e insectos.
¿CÓMO SABER EL TAMAÑO ADECUADO DE LA FUNDA?
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Ejemplo de coche tapado con una funda de tamaño inadecuado |
Al igual que cuando nos compramos ropa tenemos que escoger la talla que mejor se adapte a nuestra fisonomía, tampoco existe un "tallaje" único de fundas para coches. Vamos, que si tenemos un coche de tamaño pequeño, de nada nos va a servir poner una funda pensada para cubrir un SUV o todoterreno grande. Resumiendo, que si escogemos una funda demasiado pequeña no nos protegerá todo el coche y, si escogemos una demasiado grande, nos sobrará por todos lados y no estará correctamente fijada, por lo que perderá su efectividad.
¿Pero cómo saber cuál es el tamaño adecuado? Evidentemente, lo primero que debemos saber son las dimensiones de nuestro coche, las cuales se miden en tres apartados: largo, ancho y alto. Averiguar estas dimensiones es bien fácil, sólo tenemos que echar un vistazo a la ficha técnica, o bien buscar información del mismo en cualquier portal especializado.
Una vez conocidas las medidas de nuestro coche, solamente tenemos que fijarnos en el tallaje fijado en la funda que queramos comprar. Según el fabricante podrá venir especificada de una forma u otra, pero a grandes rasgos suele clasificarse con los mismos tipos de letras que puedes encontrar en el tallaje de la ropa. De todas formas, para dejarlo mas claro, aquí tienes una tabla de valores donde podrás ver la relación entre la talla con las medidas aproximadas que debe tener el vehículo detallada en centímetros (largo-ancho-alto) teniendo en cuenta que para la medida del alto las fundas no cubren hasta el suelo, sino hasta el parachoques.
TALLA S: 400 x 160 x 120 cm
TALLA M: 430 x 160 x 120 cm
TALLA L: 480 x 175 x 120 cm
TALLA XL: 530 x 175 x 120 cm
TALLA XXL0: 420 x 165 x 132 cm
TALLA XXL1: 463 x 173 x 143 cm
TALLA XXL2: 491 x 194 x 146 cm
TALLA XXL3: 508 x 198 x 145 cm
Espero que con este sencillo artículo haya podido resolver todas las dudas que te hubieras planteado si estás pensando en comprar una funda para tu coche, y si tienes alguna duda o aporte puedes hacerlo sin problemas en los comentarios.
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