Ir al contenido principal

FRACASOS DE VENTAS: SUZUKI KIZASHI

 


Recuerdo que cuando comencé con mi aventura bloguera con mi anterior blog, tenía una sección dedicada a coches que fueron un fracaso de ventas en el mercado español. Si no me acuerdo mal, creo que titulé a esa sección con el nombre de "marginados del asfalto".

El propósito de la sección era dar recuerdo a esos coches que, por un motivo u otro, pasaron con mas pena que gloria por las lindes hispanas, sin que ello implicase que fuesen malos vehículos. Qué leches, y también porque soy un amante de las causas perdidas.

Evidentemente, al eliminar ese blog dicha información acabó perdida en el olvido de Internet, así que me he propuesto "rescatar" esta sección, pero con un nombre menos rebuscado y más directo. Y para comenzar, he elegido a uno de mis coches fracasados favoritos.  El Suzuki Kizashi.


LOS CONCEPTS QUE "PREDIJERON SU FUTURO" 

 


Antes de la presentación del modelo de producción, Suzuki ya nos dio algunas pistas sobre cómo sería este vehículo en modo de tres prototipos que fue presentando a lo largo de diversos salones, hasta que en el Salón de Nueva York del año 2010 presentó el Kizashi3, el concept que más se acercaba al modelo de producción.

Sin embargo, en vez de acabar en algún tipo de museo, dichos prototipos fueron encontrados en una chatarrería de un lugar que no se conoce.


CON UN DIÉSEL "KIZA SHÍ" LE HUBIESE IDO MEJOR. 

 

En primer lugar, hay que reconocer que Suzuki nunca ha sido un fabricante que destaque por sus niveles de ventas en nuestro mercado, más que nada porque Europa tampoco es la prioridad en ventas del fabricante japonés. Con todo, eso no quita que Suzuki trate de pillar algún trozo de tarta en los diferentes segmentos, y en el año 2010 quiso hacerlo en el competido segmento de las berlinas medias, donde se encontraría con rivales como el Opel Insignia, Citroën C5, Peugeot 508, Volkswagen Passat o Skoda Octavia.

Fabricado en la planta japonesa de Sagara, el Kizashi estaba planteado como un modelo global que inició su andadura comercial en Estados Unidos, Australia o la India, llegando un poco más tarde a Europa. Aquí lo tenía todo para triunfar entre los entusiastas: berlina, japonesa y con motor atmosférico.  Y a todo esto había que sumar  una estética que ofrecía una línea deportiva y agresiva que se extiende a lo largo y ancho de toda la carrocería, siendo la zaga la que llamaba poderosamente la atención debido a que estaba presidida por las dos enormes salidas de los tubos de escape. 

 


 

¿Pero iría acompañada esta estética de una motorización que estuviese a la altura? Pues aquí encontramos el punto fuerte y a la vez débil del Kizashi. Porque Suzuki apostó por ofrecer una propuesta  ambiciosa pero sencilla. Se optó por el bloque 2.4 estrenado en el Grand Vitara poco tiempo antes; un motor de cuatro cilindros, 2.393 centímetros cúbicos y 16 válvulas que prometía 178 CV de potencia y 230 Nm de par. Con el cambio manual de seis velocidades declaraba una velocidad máxima de 215 km/h (discreta para su potencia) y un 0-100 km/h en 7,8 segundos. Con la caja automática CVT asociada en exclusiva a la tracción total, las prestaciones cedían un poco, dejando la  en aceleración hasta los 8,8 segundos y consiguiendo una punta de 205 km/h.

Y es que la posibilidad del 4WD con el cambio automático era otra de sus señas de identidad que no hacía más que redondear un comportamiento que se convertía en una de sus principales bazas.
 
 

 

Está claro que con este motor el comportamiento dinámico del Kizashi no se veía mermado en lo que a prestaciones se refiere, sin embargo, pecaba de ser un vehículo sediento, rozando unos consumos que rondaban los 10 litros (aunque homologase un consumo medio de 8,3 litros cada 100 kilómetros) 

Estos consumos, sumado a la ausencia de poder optar por una motorización diésel, que tan bien vistos y demandados estaban hace 12 años, y también a un precio de venta que se encontraba en esa frontera que te hacía dudar entre un generalista potente y equipado (solamente había una opción disponible denominada Sport) o dar el salto hasta un Premium en versiones de acceso, terminaron por condenar a este automóvil. 

Finalmente, el Kizashi dejó de fabricarse a nivel global en el año 2015, debido a la crisis y a la salida de la marca en Estados Unidos. 


 ¿Y SI QUIERO UNO DE SEGUNDA MANO? 

 


A fecha en el que escribo este artículo (octubre del año 2022) si bien no vamos a encontrar muchas unidades del Kizashi en el mercado de segunda mano, tenemos la ventaja de que el abanico de precios entre las unidades más baratas y las más caras es bastante amplio. 

Así, comparando en dos de las plataformas más conocidas de venta de segunda mano, podemos encontrar unidades que van desde los 7.900 euros de una unidad del año 2011 con 227.000 kilómetros hasta los 17.900 por una unidad del año 2014 con cambio automático 4WD y 99.500 kilómetros. 





Comentarios

  1. jeje... muy bueno lo del Kiza Shi hubiera sido diésel le hubiera ido mejor.
    En realidad el coche no tiene mala pinta pero es verdad que Suzuki tiene muy poco peso en nuestro pais y estaba cantado el fracaso.
    Enhorabuena por rescatar la sección de marginados!

    ResponderEliminar
  2. Si te has reído con ese chiste... O tu sentido del humor tiene el listón bajo (como el mío) o te he pillado con una copita de más, jejeje.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

MOTORES. CARACTERÍSTICAS, VENTAJAS E INCONVENIENTES DE LOS DISTINTOS TIPOS DE ARQUITECTURAS

Siempre he odiado a esa gente que dice que la verdadera belleza está en el interior, y que no importa el aspecto físico de alguien para acabar enamorándote de él o ella. No quito que puedan tener razón, pero no seamos hipócritas; lo primero en que te fijas en una persona es en su físico, más que nada porque es lo primero que ves, y después, si el físico te agrada comienzas a conocer su interior.  Con los coches ocurre lo mismo: lo primero que te entra por los ojos es su carrocería, y si te gusta comienzas a valorar aquellos aspectos que no se ven a simple vista y a los que les das importancia. Uno de esos aspectos (a mi juicio de los más importantes) es el motor. Hay quien dice que el motor es el corazón de un coche, pero yo creo que es ir más allá; es su ADN, lo que marcará su comportamiento, sus límites y su capacidad, en definitiva, su personalidad.  Son muchos los componentes que marcan las diferencias entre el motor de un coche hecho para divertir, al de otro construid

¿CUÁLES SON LOS IMPACTOS SOCIALES QUE HA CAUSADO EL AUTOMÓVIL?

Es un día como otro cualquiera. Llego de trabajar, y mientras almorzamos le pregunto a mi hijo cómo le ha ido en el colegio. Como siempre, me contesta con un desganado “bien…” pero después me dice: “¡Ah! Tenemos que hacer un trabajo sobre un invento, el que queramos”. Seguidamente le pregunté si había pensado sobre que invento hablaría, a lo que me contesta que quería hacerlo sobre el coche o la televisión, pero que casi todos los niños de su clase iban a hacer lo mismo. Finalmente, le convenzo para que haga el trabajo sobre uno de los inventos más importantes de la historia de la humanidad, la imprenta, pero las palabras de mi hijo me hicieron reflexionar… Dicen que los niños y los borrachos nunca mienten, y me resultó curioso como un niño no concibe la sociedad de hoy en día sin la existencia de un vehículo. ¿Podemos considerar, pues, al automóvil como uno de los inventos más impactantes y con más repercusión de la historia de la humanidad? ¿Cómo ha cambiado la vida de la

¿VERDADERAMENTE SON FIABLES LOS MOTORES DOWNSIZING?

Si hay una leyenda o mito común en el mundo del automóvil, es la de pensar que un buen motor debe tener un equilibrio en su relación potencia-cilindrada. Recuerdo que cuando era pequeño y me interesaba por las conversaciones de los adultos, cuando hablaban de coches la frase "ese motor está más apretado que los tornillos de un submarino" era muy común.  Y lo cierto es que para mi dicha afirmación era algo de total sentido común, hasta tal punto de que siempre ponía el mismo ejemplo: el motor de un coche es como el cuerpo de un ser humano, y al igual que a un hombre de 60 kilogramos le costará mucho más esfuerzo levantar un peso determinado que a uno de 100 kilos de puro músculo, un motor tendrá también sus limitaciones dependiendo de su cubicaje y número de cilindros.  ¿Pero qué ocurre si a nuestro hombrecillo comenzamos a atiborrarle de anabolizantes? Exacto, puede llegar al nivel de nuestro machote de 100 kilos. Pues con los motores actuales estamos viendo