CONSEJOS A SEGUIR PARA ACERTAR EN LA COMPRA DE UN CAMION DE SEGUNDA MANO

 


 

Bien sea porque te adentras en el sector profesional del transporte, porque has creado una empresa, porque necesitas renovar la flota de tu negocio, o bien porque muy a tu pesar ya debes jubilar tu querido y añorado vehículo que tantos viajes ha realizado contigo a lo largo de los años, siempre llega el momento de adquirir un camión nuevo. 

Comienza entonces un proceso de búsqueda minuciosa en la que te llevas horas viendo anuncios y mirando fotos de camiones en conocidas apss de compraventa o visitando concesionarios en busca de la mejor oferta. Sin embargo, y hoy en día sobre todo, puedes chocarte con la realidad y asumir que tu presupuesto no alcanza para adquirir un camión nuevo, por lo que debes buscar en el mercado de camiones de segunda mano

Pero como siempre suele ocurrir cada vez que tenemos (o queremos) que adquirir un producto usado, vamos con la mosca detrás de la oreja para garantizarnos que dicho producto esté en las mejores condiciones posibles. Y eso que el mercado de segunda mano nos ofrece ventajas, como el menor desembolso, seguros más baratos, y la existencia de garantía.

¿Cómo podemos asegurar, pues, de que vamos a acertar con nuestra compra? Afortunadamente hay una serie de consejos que podemos seguir durante el proceso de compra de un camión de segunda mano para estar más seguros de que vamos a realizar la adquisición perfecta. 


NO CAIGAS EN LA TENTACIÓN DE COMPRAR MÁS DE LO QUE REALMENTE NECESITAS. 

 



Muchas veces podemos caer en la tentación y dejarnos llevar más por la pasión que por la razón a la hora de comprar un camión, y al final acabamos adquiriendo un producto más costoso por equipar elementos que realmente no necesitamos. 

Por este motivo, lo ideal es elaborar un listado para determinar cuáles son las especificaciones que debe cumplir el camión que buscamos. Por ejemplo, si vamos a usarlo para transportar cargas muy pesadas debemos prestar atención a la potencia, pero si no es el caso, podemos centrarnos en modelos que consuman menos carburante. Igualmente, podemos valorar otros aspectos como si vamos a usar el camión a diaro u ocasionalmente, si queremos transmisión automática o manual, o si vamos a viajar siempre acompañados. 

En definitiva, se trata de hacer una valoración inicial del tipo de uso habitual que vamos a darle al camión y aclarar qué necesidades se derivan de ese uso. 


TIEMPO Y KILÓMETROS IDEALES.

 


 
La cantidad de kilómetros ideal que debe tener un camión de segunda mano es de 360.000 a 800.000 km. Desde el punto de vista técnico y mecánico debes saber que los expertos aseguran que la edad idónea para un camión usado es de 3 a 6 años.

Ahora bien, aunque encuentres un camión que cumple con estos requisitos, comprueba si el kilometraje que marca concuerda con las condiciones del camión, sobre todo para asegurar que no ha habido manipulación del kilometraje. Algunos detalles visibles que pueden desvelar que el kilometraje fue modificado son el exceso de degaste en el volante, la palanca de cambios y en las gomas de los pedales.


¿COMPRAR A UN PARTICULAR O A UN PROFESIONAL? 

 


El principal atractivo de comprar un camión de segunda mano a un particular es que normalmente su precio de venta debería ser inferior que el de un vehículo de las mismas similitudes que se encuentra a la venta en un concesionario al no existir la necesidad de cumplir con un margen de beneficio establecido.

Además, también podemos tener la ocasión de conocer directamente al propietario del vehículo en venta, de modo que resultará fácil conocer el tipo de uso que se le ha dado, aunque siempre existirá la posibilidad de éste pueda tirar de picaresca y engañarnos cual timador profesional. De modo que en este aspecto no queda más remedio que tirar de intuición y  no seguir adelante si no te transmite confianza.

Y el principal defecto de esta alternativa es que no debemos olvidar que no gozaremos de ningún tipo de garantía oficial a la hora de comprar nuestro camión, y en el caso de que el vendedor nos haya querido vender gato por liebre sólo podremos reclamar a través de la vía judicial.

Comprar en un concesionario es la alternativa ideal si queremos asegurarnos de tener un mínimo de seguridad de no arrepentirnos de nuestra compra, aunque ello signifique tener que pagar más cantidad que a un particular.

Para empezar, cualquier concesionario tiene la obligación legal de ofrecer un año de garantía en todos sus vehículos, además de ofrecernos una completa información del historial del mismo. Otra ventaja de la que gozaremos si acudimos a un concesionario, es que tendremos la ocasión de escoger entre un mayor abanico de opciones dentro de nuestro presupuesto, ya que suelen disponer de una gama amplia tanto en precios como en tipos de vehículos, así como la posibilidad de encontrar condiciones de financiación favorables.

Pero al igual que hay grandes profesionales, en este sector también debemos tener cuidado con los caraduras y estafadores. Por eso, si debemos acudir a un concesionario de vehículos de segunda mano, lo idóneo sería hacerlo en alguno del que tengamos buenas referencias o que conozcamos directamente. Si no fuera el caso, lo mejor es documentarse previamente sobre el establecimiento en cuestión.

 

HAZ UNA REVISIÓN EXHAUSTIVA.



Una vez tengamos localizado el camión que nos interesa, debemos realizar una revisión en profundidad para garantizar que dicho vehículo se encuentra en buen estado. Si tienes buenos conocimientos de mecánica es algo que podrías hacer tú mismo, aunque de todas formas yo aconsejo hacer la revisión acompañado de un mecánico de confianza o bien encargar dicha revisión a un taller. 

¿Y cuáles son los puntos que se deben revisar en un camión? 

  • Comprobar bien toda la carrocería del mismo, así como chasis, ejes y resortes para determinar si existen indicios de haber sufrido algún accidentes o existencia de óxido. 
  • Comprobación del estado del motor: mirar niveles de líquidos (aceite, freno, refrigeración...) así como comprobar que no existen fugas o pérdidas de los mismo. Igualmente, comprobaremos el tubo de escape para observar el color del humo, ya que puede darnos indicios de alguna avería. 
  • Comprobar el estado de los neumáticos
  • Comprobar el correcto funcionamiento del sistema de alumbrado
  • Hacer una prueba de conducción, en la que podremos observar también el funcionamiento los siguientes elementos: Funcionamiento del sistema de frenado, transmisión, suspensión y dirección. 
  • Funcionamiento de todo el panel de mandos: velocímetro, cuentarrevoluciones, indicadores, testigos, etc. 
  • Funcionamiento del climatizador o aire acondicionado.
     

Comentarios