Son bastantes las películas que han pasado a ser consideradas como míticas dentro de la historia del cine. Y no precisamente por sus guiones originales, o su historia emotiva, sino por sus escenas de acción.
Dentro de este género las persecuciones con coches y otros vehículos son como un "ingrediente obligatorio" pero pocas han llegado a ser recordadas o idolatradas gracias a esas escenas. Porque si te menciono títulos como "Bullit", "Ronin", "Death Proof", la saga "Mad Max", o incluso la más reciente "Baby Driver", seguro que sabes de qué te estoy hablando.
Por eso, me gustaría rescatar una película de origen italiano que, tal vez no sea tan conocida popularmente, pero que a mi juicio contiene escenas dignas de ser vistas, al menos, una vez en la vida.
POLIZIOTTO SPRINT / HIGHWAY RACER (1977)
Conocida también con el título "Highway Racer", esta película italiana de finales de los 70 encaja perfectamente dentro del género policiaco italiano que tan de moda estaba por aquella época, y que se caracterizaba por fusionar el thriller policiaco con la crítica social urbana.
Su argumento es bastante sencillo. Cuenta la historia de un policía llamado Marco Palma, un agente bastante temerario tras el volante que trata de emular a su mentor y legendario Comisario Tagliaferri, el cual ya está retirado.
La trama se desarrolla en las calles de Roma, donde Marco a bordo de un impresionante Ferrari 250 GTE se enfrentará a una banda criminal que comete sus actos delincuentes usando coches robados y modificados. Será el estilo de conducción agresivo y temerario de Marco el que lleve las persecuciones a situaciones límite y a enfrentarse constantemente con sus superiores, provocando situaciones límite en el asfalto.
EL MITO POLICIAL QUE SIRVIÓ DE INSPIRACIÓN
Curiosamente, el hecho de que el protagonista del film persiga a los delincuentes a mandos de un Ferrari 250 GTE no es casualidad, ya que el personaje está inspirado en el legendario agente de policía Armando Spatafora, un brigadier de la Policía de Estado italiana que alcanzó gran notoriedad en Roma durante las décadas de 1960 y 1970. Su fama se debió a su habilidad al volante y a la utilización de una Ferrari 250 GTE 2+2 como vehículo policial, convirtiéndose en una figura legendaria en la lucha contra el crimen organizado romano.
En un contexto de creciente criminalidad, Spatafora sugirió al jefe de policía que se dotara a la fuerza de una Ferrari para mejorar la eficacia en las persecuciones. Su propuesta fue aceptada, y el Ferrari 250 GTE 2+2 se convirtió en un símbolo de la lucha contra la delincuencia en Roma. Spatafora, conocido por su memoria fotográfica y destreza al volante, utilizaba el potente vehículo para patrullar las calles y realizar persecuciones a alta velocidad. Su presencia era temida por los criminales, quienes sabían que escapar de él era casi imposible
LAS ESCENAS DE PERSECUCIÓN. REALISMO EN ESTADO PURO.
Si hay algo en lo que esta película destaca, y es el motivo de que tenga este post, son sus escenas de persecución. Y no es de extrañar que eso sea así, ya que el técnico responsable de estas escenas fue Rémy Julienne, un destacado especialista en escenas de acción y coordinador de acrobacias francés, reconocido por su destreza en escenas de conducción y su participación en más de 1.400 producciones cinematográficas y televisivas. Pero estas escenas no han destacado precisamente por sus efectos especiales o espectacularidad, sino por todo lo contrario; la ejecución realista y arriesgada de las mismas.
Porque la filosofía del rodaje radicaba especialmente en la autenticidad, en el que todo debía verse real porque era real. Si un coche pasaba a 120 km/h a un palmo de la cámara, lo hacía realmente. Si volaba por los aires, no era un truco de edición. Esto convierte la película en un verdadero documento histórico sobre cómo se rodaban las escenas de acción antes de los ordenadores y los efectos especiales.
Además, las maniobras eran extremadamente arriesgadas, incluyendo saltos desde puentes, motociclistas derribados, coches que vuelcan al chocar con bordillos y un sinfín de riesgos que, hoy, serían imposibles de aprobar por un comité de seguridad. Y a a pesar de rumores (que veremos más adelante) lo cierto es que no existen registros oficiales que respalden accidentes graves durante el rodaje, ya que el equipo de Julienne era meticuloso hasta el extremo.
EL "ACCIDENTE" QUE CASI SE COBRA LA VIDA DE UN ACTOR.
Al igual que otras películas míticas están cargadas de rumores y anécdotas de hechos misteriosos que ocurrieron durante su rodaje, Poliziotto Sprint también tiene la suya.
Aunque no existan informes, entrevistas, ni documentos oficiales que confirmen un accidente real durante la filmación, según rumores publicados en foros de aficionados, un actor de la película fue ingresado gravemente en el hospital tras ser atropellado rodando una escena en la que se "suponía" que el automóvil debía esquivar al actor.
Al final de este vídeo podéis ver la famosa escena del atropello. ¿Qué piensas tras verla?
También os dejo con este vídeo de casi 15 minutos de duración donde podréis disfrutar de varias escenas de la película.
Y si después de todo esto te has quedado con ganas de ver la película completa, aquí la tienes, aunque en versión original italiana.
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