ENGERAUTO TOPAZZIO: EL PICKUP QUE TAMBIÉN QUERÍA SER UN COUPÉ.

 



Si en el último post publicado descubrimos un curioso automóvil eléctrico de origen brasileño, no abandonamos el país de la samba para conocer otro extraño vehículo que, viendo su multifuncionalidad, daría la impresión que ha sido creado bajo la inspiración suiza.

Lo primero que tenemos que saber es que Engerauto fue una empresa creada a finales del año 1983 como filial de otra empresa fundada en 1959: Companhia Santo Amaro de Automóveis. Esta compañía fue el principal concesionario Ford en Sao Paulo, y esta nueva filial creada tendría el objetivo de fabricar automóviles propios transformados a partir de vehículos Ford. 

Una de sus creaciones más llamativas fue el Engerauto Topazzio (aunque también podrás encontrarlo escrito en otros medios como Topázio), cuyo creador fue Anísio Campos. 

Para su fabricación se tomó como base el conocido pickup Ford Pampa, pero su transformación no derivó precisamente en una pickpup al uso exclusivamente.  Y es que, si uno contempla imágenes de este vehículo creerá que está viendo una especie de SUV coupé de tres puertas, pero nada más lejos de la realidad. 

 


 

Porque este vehículo era como una navaja multiusos. ¿Que necesitas mucho espacio de carga o debes transportar objetos voluminosos? Pues no había problema, porque mediante un sencillo sistema su cúpula trasera podía extraerse para dejar la zona de carga totalmente descubierta; ahora sí que teníamos una pickpup.

 




Sin embargo, si eras de los que no te gustaba el estilo coupé, también había la posibilidad de hacerte con una versión que sustituía la cúpula por una tapa más convencional, dando la impresión de tener un coche de tres volúmenes cuando se llevaba instalada. 

 



Pero ahí no quedaba la originalidad de este vehículo. Como he mencionado, carece de puertas traseras... a medias. Y es que sus ventanales posteriores podían abrirse mediante un sistema similar a las puertas alas de gaviota que, lo cual era útil para alojar en sus asientos a un niño pequeño que pudiera auparse en brazos (por tamaño los adultos no cabían) o bien para dejar objetos. En realidad, los asientos traseros eran fáciles de extraer, ya que estaban anclados a la carrocería mediante un sistema de velcros, con el objeto de que fuese fácil usar ese espacio trasero como maletero sin la necesidad de tener que extraer la cúpula. 

 

 

 

Y por último, otras curiosidades originales que presentaba el Topazzio eran su rueda de repuesto escondida tras el parachoques trasero, gato y herramientas alojados dentro del guardabarros izquierdo y a los que se accedía a través del compartimiento, o su panel de instrumentos digital.   



 

Comentarios

  1. jeje... me gustó la publicidad, "ideas para un coche del año dosmil, o como un pase de magia, gire la pagina para ver que acontecerá con esta pickup", la publicidad al menos si estuvo a la altura de la creatividad del coche.
    Un saludo!

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